Las joyas de oro pueden oscurecerse con el tiempo debido a la exposición a la humedad, a la suciedad y a la grasa natural de la piel así como el sudor o el cloro del agua (por ejemplo el cloro del agua de una piscina). Además, el contacto con productos químicos como perfumes y cremas puede contribuir a la decoloración del oro.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el oro es un metal noble y no se oxida, por lo que no se corroe ni se daña fácilmente. Por lo general, el oscurecimiento de las joyas de oro es superficial y se puede limpiar fácilmente para restaurar su brillo original.
En este espacio vamos a ver varias formas de limpiar el oro y restaurar su brillo original.
Limpiar oro con agua y jabón
Una de las formas más simples de limpiar el oro es con agua y jabón. Primero, sumerje las joyas de oro en agua tibia y agregua un poco de jabón suave. Luego, con un cepillo suave, cepilla suavemente las joyas para eliminar cualquier suciedad o grasa acumuladas. Asegúrete de cepillar todas las áreas de la joya, incluyendo las partes ocultas. Una vez que hayas terminado de cepillar, enjuaga las joyas con agua tibia y sécalas con una toalla suave.
Limpiar oro con bicarbonato de sodio y agua
Otra forma de limpiar el oro es con una solución de bicarbonato de sodio y agua. Para hacer esta solución, mezcla una cucharadita de bicarbonato de sodio con dos tazas de agua tibia. Sumerje las joyas de oro en la solución durante unos minutos, luego cepilla suavemente con un cepillo suave. Enjuaga las joyas con agua tibia y sécalas con una toalla suave.
Limpiar oro con vinagre
El vinagre puede ser una opción efectiva para limpiar el oro. El vinagre es un limpiador natural que contiene ácido acético, que puede ayudar a eliminar la suciedad y la grasa acumuladas en las joyas de oro. Además, el vinagre tiene propiedades desinfectantes que pueden ayudar a prevenir la aparición de bacterias y hongos en la joya.
Para limpiar el oro con vinagre, mezcla una parte de vinagre blanco con dos partes de agua tibia. Sumerge las joyas de oro en la solución durante unos minutos, luego cepilla suavemente con un cepillo suave. Enjuaga las joyas con agua tibia y sécalas con una toalla suave.
También puedes hacer una solución más fuerte de vinagre blanco y bicarbonato de sodio para eliminar manchas más resistentes en el oro. Mezcla una cucharada de bicarbonato de sodio con una taza de vinagre blanco y sumerge las joyas de oro en la solución durante unos minutos. Luego, cepilla suavemente con un cepillo suave y enjuaga con agua tibia.
Es importante tener en cuenta que el vinagre puede dañar ciertos tipos de piedras preciosas, como la turquesa o la perla, por lo que es mejor evitar su uso en joyas con estas piedras. Además, el vinagre puede dañar el oro bañado en rodio, un tipo de oro con una capa delgada de rodio sobre la superficie para darle un acabado plateado. Si tiene dudas sobre si el vinagre es adecuado para su joya de oro, consulte a un profesional de joyería antes de proceder con la limpieza.
Limpiar oro con alcohol
Al igual que el vinagre, el alcohol isopropílico o el alcohol etílico pueden ser opciones efectivas para limpiar el oro. El alcohol es un limpiador fuerte que puede ayudar a eliminar la suciedad y la grasa acumuladas en las joyas de oro. Además, el alcohol tiene propiedades desinfectantes que pueden ayudar a prevenir la aparición de bacterias y hongos en la joya.
Para limpiar el oro con alcohol se pueden repetir lo mismos procedimientos descritos para el vinagre. De la misma forma, mucho cuidado con ciertos tipos de piedras preciosas, como la turquesa o la perla, así como el oro que tiene una capa delgada de rodio porqué podrían dañarse.
Limpiador comercial
También puedes limpiar el oro con un limpiador comercial específico para joyas de oro. Tienes que seguir atentamente las instrucciones del fabricante al usar este tipo de producto.
Es importante tener cuidado al limpiar el oro para no dañar la joya. No uses productos químicos abrasivos o cepillos duros, ya que esto puede rayar o dañar la superficie del oro. Además, asegúrete de no exponer el oro a altas temperaturas, ya que esto puede dañar la joya.
Para mantener el oro brillante y libre de decoloración, limpia tus joyas de oro regularmente y guárdalas en un lugar seco y protegido de la humedad y la luz solar directa cuando no las estés usando. También puedes utilizar una pulsera de tela para proteger tus joyas de oro de la humedad y la suciedad mientras las llevas puestas.
En resumen, hay varias formas de limpiar el oro y restaurar su brillo original. Con un poco de cuidado y atención, puedes mantener tus joyas de oro en excelentes condiciones durante mucho tiempo. A veces, sin embargo, el oro puede tener decoloraciones más profundas o manchas que no pueden eliminarse fácilmente con limpieza casera. Si esto es el caso, es posible que debas llevar su joya a un profesional para su limpieza y pulido. Estos profesionales tienen los conocimientos y las herramientas necesarias para limpiar y pulir el oro de manera efectiva sin dañar la joya.
